Fue gracias a una peli hecha por aficionados, o fanfilm como las llaman también, con la que dimos por casualidad el otro día, que recordamos a este personaje tan bizarro. La película, o más bien, el corto, porque dura media hora, puede verse en su sitio oficial, aquí (está en ingles original, pero se pueden activar los subtítulos en unos cuantos idiomas).
Aquí en Youtube, subtitulada directamente en castellano.
(Para no variar, pincha o clicka sobre la imagen para verla con más detalle...)
Siendo uno de los secundarios del cómic de Mirage TMNT y de la posterior y numerosa franquicia (que continúa en la actualidad), Casey Jones era de los pocos del elenco, si no recuerdo mal, que no fue nunca afectado por los mocos mutagénicos esos, y era "simplemente" un ser humano, y no de otra especie animal antropomorfizada.
De base, puede parecer bastante impactante, por no decir violento, un tipo que va por ahí zurrando - abriendo cabezas, más bien - a los macarras y pandilleros con bates de béisbol, palos de hockey y similares; pero no está de más recordar que el cómic de las Ninja Turtles siempre tuvo vocación de parodia, y que la temática del cómic original en blanco y negro era más adulta que la edulcorada serie televisiva.
Precisamente, fueron los 90´s los que destacaron en la historia del cómic superheróico por la entrada de un tono más oscuro, violento y realista. Gracias en primera instancia a Alan Moore y Frank Miller, y posteriormente, por la legión de dibujantes hot (como eran llamados por los ejecutivos de Marvel y DC, las grandes compañías mafiosas de la época; que Mirage había empezado siendo una secundona, con diferencia), como Jim Lee, Todd McFarlane o el insoportable Rob Liefeld y muchos más que emigraron en su propia revolución a la fundada por ellos editorial Image. Siguiendo el impulso, uno de los géneros explotados hasta la saciedad por aquellos años fue el del (violento) vigilante callejero vengador, de los que son muestra Punisher, llamado también el Castigador, la reactualización del Motorista Fantasma, el trágico Cuervo (The Crow, James O´Barr), o la versión Dark Knight del Batman de Miller, por citar los primeros que se nos vienen a la cabeza. La mezcla de realismo sucio, oscuridad, sordidez y superhéroes sobrecargados de armamento se convirtieron prácticamente en una impronta, los cómics "noventeros". El principio del fin de los cómics de superhéroes (eso, y que coincidió con el imparable ascenso de los videojuegos en el mundo del entertainment...)
Y el amigo Casey Jones no fue más que la respuesta paródica y guasona del dúo formado por Eastman y Laird, los padres de las Ninja Turtles, su propio vigilante callejero, no armado con subfusiles, ni M-16, ni todas esas armas tan caras y que tanto abundaban en los cómics de la época, sino de algo al alcance de todos y muy contundente: ¡artículos deportivos! ¡El vigilante urbano definitivo!
Así que sólo queda por decir... ¡Goongala!
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