... o también pudieramos haber titulado la entrada Puritano vs Anglicano, o también Parlamentario vs Realista...
Lo que son las cosas, y el paso del tiempo, que hoy día, en esta época postmoderna que nos ha tocado padecer (es un decir), se tiene la idea de que un puritano es algo así como un censor y un integrista anti-progreso. En cambio, para la época de la guerras civiles inglesas (a partir de 1642 en adelante), ocurría que los defensores de la libertad y los derechos civiles eran, precisamente, los rigurosos y disciplinados puritanos, y que estos realistas, de moral más bien laxa, abogaban por el poder absoluto del rey (aunque, bien mirado, los puritanos se convirtieron defensores de ciertas libertades, pero, pudiéramos decir, por los motivos equivocados). De hecho, fue uno de estos puritanos, Oliver Cromwell, quien se alzó con el poder, y una vez instalado en él, pues como casi todo ser humano que se convierte en dictador, que primero decía que se retiraría cuando hubiese arreglado el país... y si no lo mata la malaria, ahí seguía el tío: oigan, el parlamentario que disolvió parlamentos, el defensor de la libertad de culto que persiguió a los católicos, represor de costumbres y el típico largo etcétera de contradicciones propias del ser humano...
Imagen estereotipada del puritano - roundhead, "cabeza redonda" - de la época (y, no, no es Solomon Kane - quizá su primo hermano)
Imagen no tan estereotipada del realista -
cavalier, que se podría traducir por "
pisaverde" -, quizá le falte algo de melena rizada, encajes y borceguíes para acercarse al estereotipo...